claudio.madaires@gmail.com
Es noche y soy tu amante, a ti abrazado.
Como si aún mujer adolescente,
tú me abrazas a mí con piel caliente:
hay tibieza de amor que hemos gozado.
Parece que durmieras. Te he besado;
y tú no has respondido —tan silente
cual luz de pétrea Luna indiferente.
Por la ventana, el ciclo constelado.
Desnudos dos amantes en el lecho,
¿mentimos «para siempre» un gran querer
porque aún no vivimos el invierno?...
Pongo suave mi oreja entre tu pecho.
Tu respirar hermoso de mujer
me da lánguido sueño, sueño eterno.
© Claudio Madaires
No hay comentarios:
Publicar un comentario